La guerra entre Carrillo y Monteseirín puede llevar al Ayuntamiento a la huelga

20/02/2009
Actualizado a las 08:13h.

Las diferencias entre el alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, y el delegado de Recursos Humanos, Emilio Carrillo, pueden provocar una huelga en el Ayuntamiento ya que los sindicatos sospechan que no se han respetados los acuerdos alcanzados entre los representantes de los trabajadores y Carrillo en la elaboración de los Presupuestos de 2009 que no contemplan determinadas partidas presupuestarias referentes a acuerdos tomados en 2005 y 2006 y que fueron consolidados en la negociación que el pasado mes de enero mantuvo el delegado de Recursos Humanos con los sindicatos. Se trataría de una supuesta estrategia de los delegados afines al alcalde contra Carrillo.

La desconfianza de los sindicatos es tal que ni en el supuesto de que el Pleno de hoy acordase incluir en el presupuesto los acuerdos adoptados, verían garantizado su cumplimiento. El secretario de CC.OO. en el Ayuntamiento, Manuel Gutiérrez, aseguró ayer junto al resto de los representantes sindicales —salvo el de Bomberos—, que si el alcalde se niega a ratificar el acuerdo ya alcanzado supondría un descrédito institucional a la vez que pondría de manifiesto «su poca capacidad para resolver».

Gutiérrez fue más allá al afirmar, con posterioridad a su comparecencia junto al resto de los representantes, que él sí confía en Carrillo «porque es un tipo honesto».

Los sindicatos se han reunido con los tres grupos políticos del Ayuntamiento para pedirle que hoy en el Pleno respalden los acuerdos. El PSOE, en principio, avanzó que no lo hará e IU tampoco. Pero el PP llevará la aprobación del acuerdo por vía de urgencia al Pleno. La situación deja en dificultades al dividido grupo socialista, que tendrá que decidir una estrategia para no dejar en evidencia a Carrillo quien reivindica la aprobación del acuerdo tal como fue elevado a la Alcadía el pasado día 22 de enero. La división podría incluso llevar a romper la disciplina de voto del grupo socialista.

Por su parte, Miguel Ángel Sáenz, secretario general de CSI-Csif en el Ayuntamiento, aseguró que no «le van a tapar la boca» atendiendo sólo las reivindicaciones salariales ya que los acuerdos alcanzados incluyen cubrir las vacantes, que rondan la treintena, y las 189 plazas previstas, entre otros acuerdos de retribuciones que fueron acordados hace años pero que Carrillo aceptó incluir en la negociación colectiva para no romper los compromisos adquiridos por la Corporación municipal.

Denuncia en los tribunales

Para Santiago de los Reyes, secretario general de UGT en la Administración Local, los últimos acuerdos incluían los alcanzados con los predecesores de Carrillo en la Delegación de Personal: Nieves Hernández y Alfonso Mir. Conscientes de la crisis, los sindicatos han solicitado reunirse con el alcalde para que les informe de la situación real pero ni les ha contestado, ni les ha recibido. Por ello no descartan empezar a convocar a los trabajadores a partir del 4 de marzo ni denunciar al Ayuntamiento en los tribunales por inclumplir los acuerdos. Agregó que si el presupuesto no incluye los acuerdos se estará faltando el respeto a los trabajadores y a los ciudadanos porque se perderá empleo y porque los servicios, como los que prestan Participación Ciudadana y Bienestar Social, entre otros, se resentirán.

Dinero para otras cosas

Manuel Bustelo, presidente de Sppme en el Ayuntamiento, aseguró que en años anteriores los acuerdos se han incumplido porque el Gobierno Local ha argumentado que el presupuesto ya estaba aprobado y la inclusión de los mismos obligaría a modificaciones. No es el caso de este año porque Sevilla funciona aún con el presupuesto de 2008 prorrogado. Agregó que el Ayuntamiento está engañando a los ciudadanos cuando habla de crear empleo ya que en la mayoría de los servicios falta personal debido a que el dinero, por ejemplo para cubrir las vacantes, «se está destinando a cosas que le gustan más al alcalde». Aunque lo que supondría económicamente materializar sus acuerdos no está cuantificado, los representantes sindicales no creen que superara los 16 millones de euros y eso teniendo en cuenta que entre el 60 y el 70 por ciento sería para crear empleo.

Lo que sí tienen claro los sindicatos es que de no cumplirse lo acordado, como le han hecho saber algunos concejales del PSOE, «se tirarán a la calle» para dar «una respuesta contundente».

«Utilizados»

Mientras, el secretario general del SPB, Juan Carlos Bernabé, se ha desmarcado por entender que están siendo «utilizados políticamente» y usados por UGT y CC.OO en sus luchas de poder. Aún así, Bernabé considera que el Ayuntamiento tiene capacidad para asumir los acuerdos pero afirma que las dos centrales mayoritarias están utilizando a los trabajadores «en la guerra del PSOE».