Francisco de Goya pertenecía a la baja nobleza por parte de madre y de padre. Hasta ahora se sabía del linaje de su rama materna, pero nada se había confirmado sobre su condición noble por vía paterna. Un manuscrito hallado en el Archivo General del Ministerio de Justicia, en Madrid, ha demostrado que el genio de Fuendetodos descendía de la nobleza guipuzcoana, una familia de hidalgos de Ceráin, para más señas.

El documento que lo acredita es una «certificación de nobleza», que fue expedida en el año 1831 en favor del único hijo y heredero de Francisco de Goya, Javier de Goya y Goicoechea. Esa certificación fue emitida por Pedro de Rújula, rey de armas de Fernando VII. Aunque algunos de los datos que incorpora son erróneos, sí que acierta en pruebas irrefutables sobre la nobleza de la familia paterna del pintor.

La «certificación de armas» ha sido estudiada en profundidad por un equipo de cinco miembros de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, dirigidos por el profesor Guillermo Redondo y por el jurista militar Fernando García-Mercadal.

Para determinar que las pruebas de nobleza que constaban en la «certificación de armas» eran correctas, los investigadores han acudido al Archivo General de Guipúzcoa. Y allí han dado con los documentos originales que reconocieron, en el año 1657, la nobleza de los antepasados de Goya.

Reinterpretar su obra

García-Mercadal ha explicado a ABC que estos hallazgos son relevantes, tanto por su carácter histórico como por sus repercusiones en el estudio de la obra artística de Francisco de Goya. «Arroja nuevos datos, abre nuevas hipótesis sobre la interpretación de algunas de sus obras, como el Capricho número 39, considerada hasta ahora un paradigma de la actitud crítica del pintor hacia la nobleza como clase ociosa e improductiva, cuando quizás se tratase más bien de una sátira de las aspiraciones nobiliarias sin fundamento». García-Mercadal cree que lo que Goya pudo querer con el Capricho 39 fue «fustigar a los genealogistas y reyes de armas que tantos quebraderos de cabeza le provocaron y que le frustraron en sus aspiraciones» para ser reconocido como parte de la nobleza.

Francisco de Goya se esforzó durante años en obtener ese reconocimiento que, al final, logró su hijo. Su madre pertenecía a una familia infanzona (hidalgos en la tradición castellana) de Fuendetodos (Zaragoza). Pero, como explica García-Mercadal, en aquel momento lo determinante para ser reconocido como parte de la nobleza no era el linaje de la rama materna -aunque ayudaba- sino el de la paterna.

Biznieto de un general

El estudio que se ha realizado a raíz del hallazgo de ese manuscrito de 1831 ha permitido conocer otros datos. Por ejemplo, que un bisabuelo del pintor, Francisco Franque, fue general de las tropas de Felipe IV. Es un hecho relevante a los efectos de este estudio, porque en la época un cargo militar de ese rango quedaba restringido a la nobleza.

El estudio en profundidad de la certificación de armas de 1831 y de los documentos del Archivo General de Guipúzcoa, así como de algunas cartas que Goya escribió sobre el mismo asunto a su amigo Martín Zapater -depositadas en el Museo del Prado- han sustanciado el estudio del equipo dirigido por Guillermo Redondo y Fernando García-Mercadal.

Noble, pero sin título

Esta investigación, en suma, ha permitido demostrar que Francisco de Goya pertenecía a la baja nobleza por doble vía, la paterna y la materna. No ostentaban título sino que pertenecían al grupo de infanzones o hidalgos, un reconocimiento genérico de nobleza que, en cualquier caso, otorgaba ventajas sociales y jurídicas en el Antiguo Régimen.

El Justicia de Aragón ha publicado una edición facsímil sobre ese manuscrito de 1831, que se complementa con una genealogía del pintor realizada por los investigadores Iñaki Garrido y Javier Gómez de Olea. Se remonta hasta Esteban de Goya, señor del caserío de Manchola, en Ceráin (Guipúzcoa), en el siglo XVI. Hasta ahora, es el antepasado más antiguo que se le conoce a Francisco de Goya.

Además, se ha realizado un análisis paleográfico de la certificación de nobleza, elaborado por el catedrático Alberto Montaner, de la Universidad de Zaragoza.

Sus actuales descendientes

Toda esta investigación también ha permitido localizar a los actuales descendientes de Francisco de Goya. Según ha explicado García-Mercadal, se trata de José María de Goya García, intendente mayor de la Policía Municipal de Tarragona; su hermano Luis, brigada del Ejército destinado en Afganistán, y su primo Mariano de Goya Jurado, que reside en La Coruña.