La ola de protestas se extiende y alcanza a Griñán en Jerez y a Zarrías en Jaén

El presidente fue recibido ayer con una pitada a su llegada al Ayuntamiento de Jerez El secretario de Estado de Cooperación Territorial fue recriminado por los expropiados de la A-32

E. CAMACHO/J. LÓPEZ

21/10/2010 a las 01:50h.

Colectivos ciudadanos descontentos con la actuación de las administraciones están poniendo de actualidad en los últimos tiempos una antigua forma de protesta, el abucheo a los responsables políticos. Del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para abajo, pocos dirigentes se escapan de ser los destinatarios de esta manera de expresar un malestar.

Ayer, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, en su visita a Jerez, y el secretario de Estado de Cooperación Territorial, Gaspar Zarrías, en el recorrido que hizo por las obras de la A-32, en la provincia de Jaén, sintieron muy de cerca este tipo de presión.

El presidente de la Junta Andalucía, José Antonio Griñán, fue recibido ayer con una sonora pitada por parte de más de medio centenar de trabajadores que la aguardaban a las puertas del Ayuntamiento de Jerez, donde realizaba su primera visita institucional desde que es presidente autonómico.

Agencia del Agua

Después de los pitos y abucheos que tuvieron que soportar Manuel Chaves y Alfredo Sánchez Monteseirín con motivo de la reinauguración de la plaza de España en Sevilla, ayer fue el mandatario andaluz el que recibió los abucheos de un nutrido grupo de trabajadores de la Agencia Andaluza de Agua, de eventuales de la concesionaria del transporte urbano en Jerez y de la Asociación de Parados de Jerez.

Estos últimos, incluso, llegaron a enfrentarse a un reducido grupo de simpatizantes socialistas que aplaudían tanto al presidente andaluz como a la alcaldesa socialista de Jerez, Pilar Sánchez.

Tras el saludo a la corporación municipal y la firma en el libro de honor de Jerez, Griñán por fin avaló la candidatura de Pilar Sánchez a la reelección como alcaldesa: «Expresarle mi total solidaridad y apoyo personal a Pilar, que creo que es una alcaldesa que ha demostrado que ha ganado unas elecciones con mayoría absoluta en una ciudad en la que parecía impensable y creo que a partir de ahora y hasta las elecciones, y esto lo digo ya como secretario general de los socialistas andaluces, Pilar va a tener mi pleno apoyo». Seguidamente, José Antonio Griñán inauguraba la nueva sede del Centro de Rehabilitación Integral y Unidad de Estancia Diurna «Alfonso Perales».

Mientras esto sucedía en Jerez, en el municipio jiennense de Canena, Gaspar Zarrías, secretario de Estado de Cooperación Territorial, y Víctor Morlán, secretario de Estado de Infraestructuras, fueron también recibidos con protestas por medio centenar de agricultores por el impago de los olivos arrancados en el marco de las expropiaciones ordenadas por el Ministerio de Fomento para construir la autovía A-32, que enlaza Andalucía con el Levante español.

«No hemos visto un duro», dijo uno. «Todo es mentira ¡vaya una gente!», expuso otro agricultor. Un tercero señaló que es la primera vez en la historia que les quitan lo suyo sin contraprestación económica. También hubo quien lamentó el paripé escenificado por la llegada de los mandatarios. Denunció en concreto la abundancia de trabajadores «con chaleco», cuando, según expuso, «hace dos meses que aquí no se trabaja».

Ajeno a la crítica, el secretario de Estado de Planificación e Infraestructuras del Ministerio de Fomento supervisó los trabajos de hormigonado de los tableros de la estructura definida para el futuro enlace de Canena, situado en el tramo citado, y comprobó in situ el avance de la ejecución de las obras de los tramos de la A-32: Ibros-Úbeda, Linares-Ibros y Úbeda-Torreperogil. Los tres tramos que están en ejecución suponen una inversión superior a los 190 millones de euros y una longitud de trazado del orden de 43 kilómetros.