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Investigan si IU de Manilva pagó 20 euros por voto a inmigrantes

Policía y Guardia Civil realizan pesquisas tras las denuncias de la oposición

P. D. ALMOGUERA

El cúmulo de presuntas irregularidades que giran en torno al equipo de gobierno de IU en Manilva parece no tener fin. Tras las acusaciones de «enchufismo», adjudicaciones irregulares de contratos a familiares y afiliados o la supuesta agresión de la alcaldesa, Antonia Muñoz, a la candidata del PA, la cosa se complica aún más. La Policía Nacional y la Guardia Civil investigan un «pucherazo» electoral a raíz de la denuncia interpuesta por PP, PSOE y a Agrupación Socialista de Manilva (ASM) en la que se recoge el pago de 20 euros a inmigrantes sudamericanos y rumanos para que votasen a la coalición de izquierdas las pasadas municipales. Una cifra que se elevaba hasta 100 euros para aquellos que consiguiesen sufragios de más compatriotas.

Fuentes de los partidos denunciantes explicaron a ABC que lo ocurrido el 22-M en los colegios electorales de Manilva fue tan grave que la Policía Judicial tuvo que intervenir a última hora de la tarde al considerar que los hechos podían ser constitutivos de delitos penales. «Se hallaron en los contenedores próximos centenares de votos para IU ya preparados. Una edil repartió seis de ellos delante de nuestras narices e incluso entraban por grupos a los cuartos de baño», explicó uno de los interventores.

Las citadas fuentes llegaron a describir una situación kafkiana: «Un invidente llegó para votar, pidió que le indicaran dónde estaba la papeleta del PSOE y le entregaron un sobre diciendo que era esa. Cuando llegó a la mesa, el presidente le preguntó que a qué partido iba a votar y reiteró que a los populares. Pero al abrirse el sobre para cerciorarse que se ajustaba a su deseo, se comprobó que era un sufragio para IU».

«En mi país es habitual»

El asunto comenzó a tomar tintes de delitos cuando los interventores de los partidos denunciantes observaron cómo algunos inmigrantes que habían votado regresaban porque querían cambiar su voto. «Descubrimos que se les pagaba 20 euros por cada sufragio a IU y 100 a los que consiguieran llevar a varios compatriotas», contaron las fuentes consultadas, que señalaron que cuando les dijeron que podían estar cometiendo algo muy grave «nos respondieron que en su país era algo habitual».

El testimonio de estos inmigrantes, los cuales están localizados, es la principal prueba con la que cuentan los denunciantes, que también han adjuntado fotografías —como las de los votos preparados en los contenedores—.

El subdelegado del Gobierno, Hilario López Luna, precisó que estos hechos han sido trasladados a la autoridad judicial para que «decida lo que corresponda». Añadió que «habrá que esperar una resolución judicial» ante las denuncias, las cuales fueron interpuestas el mismo 22 de mayo por apoderados de la oposición.

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