«Los cielos que perdimos»
Así, con las potencias y las espinas iba a salir El Cachorro este Viernes Santo . Pero un año más nos quedamos sin verlo en la calle. Para aliviar la pena miles de personas se acercaron a verlo el Domingo de Resurrección para besarle los pies, rezarle y hablar con el crucificado más vivo del universo. En Triana no ha muerte que pueda con la vida
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