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Un profesor perderá al año 2.620 euros por los recortes

CSIF afirma que los funcionarios están «absolutamente» decepcionados con IU

Un profesor perderá al año 2.620 euros por los recortes

JOSÉ CEJUDO

El sindicato CSIF ha considerado sumamente negativos los efectos del plan de ajuste aprobado por la Junta el pasado martes, y ha llevado a cabo un primer análisis de sus consecuencias en el sector de la enseñanza, donde ha observado que un profesor de Secundaria con 30 años de servicio dejará de percibir 2.620 euros anuales, mientras que un maestro, en similares circunstancias, perderá 1.858 euros anuales. En el caso de un director de Instituto serían de 3.700 euros.

En concreto, asegura CSIF, en las pagas extraordinarias el profesorado dejará de cobrar el complemento específico básico y el complemento por cargo docente. El polémico Programa de Calidad, dice, se mantiene y se descontará el 10% de las cantidades que perciba el profesorado por este concepto, que se detraerán de las dos pagas extras, de junio y diciembre. Como en la de junio no ha dado tiempo, se prorrateará el importe del recorte durante los meses que restan para acabar el año.

El decreto en cuestión ha sido duramente criticado por la presidenta del sector de Administración General de CSIF en Andalucía, Alicia Martos, que el pasado martes resultó reelegida en el cargo por unanimidad.

En declaraciones a ABC, Martos indicó que para los trabajadores de la Administración General de la Junta el plan de ajuste es como «llover sobre mojado» después del conflicto surgido por la denominada «ley del enchufismo», porque el Gobierno no podrá evitar nunca la percepción de que una cosa sea consecuencia de la otra.

«Cuando todavía están los funcionarios indignados por la ley de reordenación, ahora la Junta se inventa un plan de ajuste para recortar 2.700 millones. Pero ese era su único compromiso, porque el Gobierno central no le ha dicho dónde tiene que recortar. Y la Junta ha ido a lo fácil, al botoncito del sueldo de los empleados públicos». En su opinión, se podría recurrir a otros capítulos para ese ahorro, fundamentalmente el de la «Administración paralela», donde en su opinión se ha acumulado «un despilfarro que tantas veces hemos denunciado»

Según Alicia Martos, después de que IU haya entrado a formar parte del Gobierno de la Junta, entre los funcionarios existe una absoluta «decepción» con la actitud de esta formación política, porque muchos de los empleados públicos «habían confiado en sus promesas electorales de que no permitiría ni un recorte ni un despido», circunstancia, esta última, que sí afectará a los interinos.

Sin embargo, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, terció en la polémica para defender el plan de ajuste porque a diferencia de lo ocurrido en otras comunidades autónomas evita los despidos y la privatización de servicios básicos. En opinión de Griñán, la política de ajuste en Andalucía está en un 95 por ciento provocada por decisiones del Ejecutivo central.

Por su parte, Carmen Crespo, delegada del Gobierno en Andalucía, pidió a la Junta que abandone la demagogia y asuma que podría haber hecho las cosas de otra manera «sin tocar el bolsillo de los empleados públicos».

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