Un escudo del Betis en la torre Pelli

Los operarios de la empresa constructora del rascacielos de la isla de la Cartuja han hecho profesión de beticismo en el techo de la ciudad de Sevilla. Y lo han mostrado a todo el mundo en un vídeo que han colgado en las redes sociales. [ Haz clic aquí para ver el vídeo ]

Los albañiles, especialistas en soldadura, se precian en la grabación de colocar un escudo metálico del equipo de sus amores en la última viga del edificio, actualmente en la última fase constructiva con el cerramiento de la parte superior del inmueble . La obra coronó en diciembre, con la instalación de las dos banderas (España y Andalucía) que certifican que la estructura ha alcanzado su cota más alta.

La instalación de este escudo metálico en sitio tan destacado sigue la estela de otros emplazamientos igualmente sonados en la ciudad. En la Plaza Nueva, el salón principal de Sevilla, hay un escudo del Betis confeccionado a base de chinos lavados en el suelo con la particularidad de que se hizo en tiempos de la Segunda República, cuando se despojó del patronazgo regio al conjunto verdiblanco, motivo por el que el emblema del club heliopolitano figura sin corona. Se da la circunstancia de que el escudo fue respetado en la rehabilitación que siguió a los trabajos de repavimentación de la plaza a finales de los años 80 cuando se cegó el socavón para construir la estación del metro finalmente desechada.

En uno de los varales maestros del palio de la Virgen de las Mercedes de la cofradía de Santa Genoveva aparece también el escudo del Betis en agradecimiento a la donación de la peña bética del barrio del Tiro de Línea donde radica la hermandad. En este caso, en su pareja puede verse el escudo del Sevilla FC porque igualmente fue donación de la peña sevillista del barrio. Caso idéntico al de los candelabros de cola de la Hiniesta, estrenados en el año 2002, con la iconografía de ambos clubes de la ciudad.

Más recientemente, en 2005, la insignia del club de la Palmera se coló en la portada de Feria que ese año se dedicaba al conjunto rival por el centenario de su fundación. Con habilidad y disimulo, el artista encargado de pintar los paneles de la portada aprovechó el broche de la capa del rey San Fernando en el escudo de la ciudad para dejar allí una miniatura con el emblema del club de sus amores. Fue, hasta ahora en que lo han superado los soldadores del rascacielos, la cota más alta a la que había llegado el escudo del Real Betis Balompié.